Una persona con discapacidad intelectual trabajando en un CET // Foto: Dincat
Lunes, representante del sector de la discapacidad intelectual y el desarrollo, vuelve a reclamar el compromiso de la administración pública, las empresas y la sociedad en general para impulsar un nuevo modelo de inserción laboral más inclusivo y sostenible que garantice a la comunidad el derecho al Trabajo. La federación lanza este llamamiento en el marco del Día Internacional del Trabajador, que se celebra hoy, alertando de un nuevo descenso en la tasa de empleo del colectivo, que evidencia una brecha abismal entre las oportunidades laborales de las personas con discapacidad intelectual y las que no tienen discapacidad.
Los datos de la estadística anual de empleo de personas con discapacidad del INE muestran un descenso, tanto de la tasa de actividad como de la tasa de empleo, de las personas con discapacidad intelectual para todo el año 2021, de 0,8 y 0,4 puntos, respectivamente. En concreto, la tasa de actividad de las personas con discapacidad intelectual es del 27,5%, mientras que la de las personas sin discapacidad es del 77,71%. En cuanto a la tasa de empleo, la de las personas con discapacidad intelectual alcanza solo el 17,2%, mientras que la de las personas sin discapacidad se sitúa en el 66,3%.
Estos datos muestran que solo 1 de cada 5 personas con discapacidad intelectual activa tiene actualmente un trabajo, una baja presencia en el mercado laboral, una cifra muy preocupante teniendo en cuenta que el trabajo es uno de los principales mecanismos de inclusión social.
“Se necesita avanzar mucho más en la promoción de la inclusión laboral. Llevamos años trabajando en equipo para revertir esta situación, pero las cifras no solo no mejoran, sino que empeoran año tras año. Necesitamos un enfoque global para el país, una estrategia catalana para el empleo de las personas con discapacidad»explica Víctor Galmés, director de Dincat. “Necesitamos una gran alianza entre administraciones, sector social y empresas para conseguir este objetivo en los próximos años”, agregar.
Para revertir esta situación y con el deseo de derribar las barreras que muchas de estas personas siguen encontrando hoy en día en el ámbito laboral, Dincat publicó en 2021 el informe Propuestas para avanzar hacia un nuevo modelo de inserción laboral más inclusivo y sostenible para las personas con discapacidad intelectual. y dificultades especiales. El documento aporta cerca de 50 propuestas para avanzar hacia un nuevo modelo de inserción laboral, que parten de un análisis en profundidad de las dificultades que tienen estas personas a la hora de encontrar trabajo, lo que se traduce en una escasa inclusión social, dificultando el desarrollo de sus proyectos de vida y que representan un obstáculo para llevar una vida autónoma e independiente.
Uno de los principales retos que reporta la Dincat es la necesidad de aumentar los recursos, trabajar con apoyos y financiación para la inserción laboral de las personas con discapacidad intelectual, independientemente de que trabajen en un Centro Especial de Empleo o en una empresa ordinaria. Al mismo tiempo, la federación dice que está aumentando su actual cuota legal de reserva de empleo del 2 % al 4 % (reservando un mínimo del 1 % para las personas con discapacidad intelectual) y está siendo extremadamente estricta al hacer cumplir las medidas alternativas; pedir más concursos públicos reservados para personas con discapacidad intelectual, asegurando la accesibilidad en todos los procesos y publicaciones; y desarrollar, entre otras cosas, políticas de formación profesional adaptadas.