No todo es tenis.
Rafael Nadal Consiguió hacerse un nombre en la gran historia del deporte, superando al tenis y situándose entre los más laureados de todos los tiempos. Esto llevó a que su legado se extendiera más allá de los torneos y competencias en los que participó y logró inspirar a muchos en todo el mundo.
Tal vez por eso en 2016 Rafael Nadal Decidió abrir su propia academia en Manacor, su tierra natal, para atraer y empoderar a jóvenes que quisieran seguir sus pasos. Hoy, casi seis años después de esa inauguración, el lugar se ha convertido en uno de los principales lugares deportivos del mundo, así como en uno de los negocios de tenis más estables.
El lugar cuenta con 34 pistas de diferentes superficies, dos piscinas, un departamento de profesionales médicos, alojamiento de lujo, similar a un hotel de cinco estrellas. A ello se suman decenas de profesores, entre los que destaca Toni Nadal, que ofrecen seis horas de clases de tenis, doce de inglés y nueve de otras disciplinas a cada alumno por semana.
El bonito asunto de la academia de Rafa Nadal
Como era de esperar, la calidad de los cursos que ofrece se traduce en precios que no son para todos. Las plazas son muy limitadas, apenas se aceptan 10 estudiantes por semana, y cada una de estas plazas ronda los 2.300 dólares. Sin duda, es una gran empresa, a la que Rafael Nadal sabe aprovecharlo.