Habló el exconcursante de ‘Hechos’.
Ana María Aldón Ha soportado muchas situaciones desagradables desde que decidió compartir su vida con Ortega Cano. La colaboradora se ha puesto de parte de su marido, una vez más, después del último episodio de “Montealto”, donde Rocío Carrasco no lo ha dejado precisamente bien frente a todos: llegó a decir que si pudiera borraría al extorero de la vida de su madre.
Estas palabras fueron demoledoras para toda la familia, pero especialmente para Ana María Aldón, quien lo elige todos los días como compañero de vida. La conductora del programa de entrevistas habló en «Viva la vida» sobre estas acusaciones contra su pareja. Empezó diciendo que no había visto el programa porque tenía que cumplir un compromiso en Valencia.
Visualizando lo sucedido, el medio aseguró que lo que más le molestaba era que su pareja fuera vista como un error. Hace una semana se puso del lado Rocío Carrasco en ciertas cosas, pero si juega con su marido, juega con ella. «Hasta la primera hora, por la forma en que me habló, sé que lo vio», dijo.
Noté tristeza.
Fuente: (Instagram).
Según el testimonio de la famosa, su compañera estaría afectada por las declaraciones de la ex de Antonio David. Y es que no solo lo dijo él, sino que está frente a millones de personas, una realidad difícil de asimilar. «Lo que más me conmovió fue que mi esposo está en juicio y ha hecho lo que se suponía que debía hacer», dijo.
Pasé esta etapa a su lado y me duele mucho.
“No entiendo por qué alguien tiene que recordárselo o usar este paso para hacer más daño. Si tienes algo que decir, dilo, pero te estás refiriendo a otro paso que no tiene nada que ver con lo que estás hablando desde mi punto de vista”, dijo.
“Hablé con mi esposo antes de venir y tengo un mensaje de él, más bien una respuesta. Un reflejo del pasado. Me dijo: “Estoy muy tranquilo. Tengo la conciencia muy tranquila”. No podemos vivir así. Temo por su salud. Me preocupa. No es de ahora, antes me preocupaba. No tendría un corazón aquí, tendría una papa”, dijo. Ana María Aldón. ¿Podrá Ortega Cano soportar todo lo que está por venir